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Pero este escrito no es para tratar exclusivamente el caso Figueroa Agosto, sino para hacer una relación de escándalos que parecen haberse olvidado en el año que finaliza.
Foto de archivo de hermano del coronel González González en la escena del crimen (Archivo)
SANTO DOMINGO (R. Dominicana).- A casi cuatro meses de que estallara el “escándalo Figueroa Agosto” parece que las autoridades no tienen nada concreto, toda vez que las personas presas por el caso lucen como parte de los “efectos colaterales”, además de que en la investigación participaban personas que han debido ser parte del expediente.
Qué decir del caso del asesinado ex coronel policial José Amado González González, a nombre de quien estaba la yipeta en la que encontraron los 4.6 millones de dólares que dio origen al expediente por lavado de activos en contra de José Figueroa Agosto, Sobeida Félix, Mary Peláez y Eddy Brito.
El interrogatorio al alto oficial estaba previsto para días próximos, pero qué pudo impedir su apresamiento desde el mismo del hallazgo del cargamento de dólares en un vehículo a su nombre, si a Sobeida Félix la detuvieron por alegadamente ser propietaria de unos apartamentos donde se supone que no se encontró un solo dólar.
Se puede empezar de atrás para adelante y mencionar el caso del cirujano plástico Joan Tapia Bueno, sometido a la justicia por alrededor de una docena de mujeres a las que puso al borde de la muerte tras practicarles liposucciones y otras intervenciones estéticas.
El secuestro, para muchos entre comillas, del joven Eduardo Baldera Gómez, que terminó con la ejecución de dos supuestos raptores por parte de un grupo de cinco oficiales, y como parte de las secuelas del mismo caso, la desaparición del predicador evangélico Juan Almonte.
El caso del diputado Julio Romero, quien fuera acusado de embarazar a una joven menor de edad y negarse a reconocer un hijo procreada con ésta, así como la vinculación del legislador en presuntos actos de violación sexual por varias mujeres.
También parece olvidado el caso del senador Alejandro Williams, de San Pedro de Macorís y residente en Nueva York, quien amenazó y ejerció acciones intimidatorias, valiéndose de espalderos, a las periodistas María Isabel Soldevila, Margarita Cordero y Norma Shephard.
Las sentencias condenatorias de los ex banqueros Pedro Castillo, del Banco del Progreso y Andrés Aybar, del Banco Mercantil.
El asesinato del capo de las drogas Rolando Florián Félix, en su celda de la cárcel de Najayo.
Los actos de corrupción en el Programa de Reducción de Apagones (PRA), la Oficina Técnica de Transporte Terrestre (OTTT) y la abultada nómina de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), que incluía parientes cercanos de funcionarios y hasta un supuesto hermano del presidente Leonel Fernández, lo que provocó la destitución de Radhamés Segura de la vicepresidencia ejecutiva de la entidad.
El escándalo en la Junta Central Electoral (JCE) por la denuncia de la magistrada Aura Celeste Fernández sobre la supuesta falta de transparencia del uso de recursos por parte de la Cámara Administrativa del organismo.
En fin, la lista de escándalos olvidados en este año es larga, agregue usted su caso, porque hasta los fraudes en las convenciones del PLD y el PRD, han pasado a segundo plano con el caso Figueroa Agosto.
7dias.com.do
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