Miguel Franjul y Wendy Santana - 4/20/
CHANTAJE. EL SERVICIO DE INTELIGENCIA MILITAR LE PIDIÓ QUE SE HUMILLARA ANTE EL DICTADOR
Fuente: Listín Diario
Santo Domingo.- Con un dejo de ironía que no podía disimular, la doctora Asela Morel, reconocida heroína antitrujillista, refuta las afirmaciones de Angelita Trujillo presentando a su padre como el “más tierno y gentil con las damas”.
Ella, que sufrió junto a las hermanas Mirabal y a otras valerosas mujeres la persecución y saña del tirano, lo describió así, parafraseando a Angelita: “Sí, él debió ser muy tierno porque le encantaban las mujeres. Todas las quería para él, para gozarlas” y a mí me dijo él, junto a otras personas (estaba José Israel Cuello o otros dos muchachos) yo quiero que ustedes sepan que si vuelven a complotar -palabra textual, eso no se me olvida nunca, les voy a cortar el cocote, y yo era la única mujer”.
“Cuando él me hizo la amenaza lo que me dieron fueron ganas de reír porque yo dije, bueno, pero qué forma tienen de tratar a las personas que no son de su grupo. Ya estaba loco. Yo salí riéndome porque me daban ganas de reír, ya con tantas cosas que habían pasado... Y entonces sonreí y el doctor Cuello me dijo: doctora, doctora.”.
La hija del dictador dice en el capítulo dedicado a las hermanas Mirabal que: “Mi papá no era machista, era la persona más expresiva y galante con las damas y como fruto de esos sentimientos brotaba su protección y exaltación a la mujer dominicana que supo apreciar y reciprocar la distinción de que era objeto”.
Sobre la reacción de Trujillo cuando le informaron de la muerte de las Mirabal, Angelita también comenta que su padre “se puso furioso, furioso de verdad. Eran muy raras las ocasiones en que mi papá traía novedades políticas a la casa, sin embargo, era una de las pocas veces que no podía disimular su enojo. Mi mamá fue testigo de su frustración ante ese crimen”.
Cuando Asela Morel escucha estas frases sonríe como hizo durante casi toda la entrevista cuando le hablaban de las “bondades” de Trujillo y las obras que hizo por el país. “Yo no recuerdo nada bueno de la era de Trujillo. Todo era malo. Trujillo hacía de todo. Eso fue horrible, horrible” y lo repetía varias veces.
El doctor Pérez Sosa, agente del Servicio de Inteligencia Militar, le informó a doña Asela que tenía que escribir una carta en los periódicos alabando a Trujillo por su magnanimidad y agradecimiento por la libertad que le habían otorgado, pero ella nunca la escribió y por eso esperaba cada día que fueran a apresarla de nuevo.
Mataron a mucha gente
“La época de Trujillo fue horrible, repugnante”, dice la doctora Asela Morel con un gesto de repudio en sus labios. “Cuando yo salí de la cárcel ya el movimiento 14 de Junio se había desmembrado porque eso fue horrible; mataron a mucha gente y a muchos muchachos. En Santiago mataron cantidades”.
Los ideales del movimiento 1J4, inspirados en el sistema político de entonces en Cuba, se enfocaban en conservar la insignia de las libertades públicas y el respeto por la dignidad humana y el desarrollo de la sociedad en su conjunto.
El otro grupo, que finalmente ejecutó el plan para eliminar a Trujillo, tenía sentimientos de desprecio hacia el jefe, porque aún siendo parte de su cuadrilla de amigos, empleados y allegados, había sufrido la pérdida de algún familiar que entendían como una crueldad, o habían sido víctima directamente de las “decisiones políticas” del gobernante.
ESTA ES MI VALORACIÓN SOBRE ASELA MOREL
TONY RAFUL
Para mí la doctora Asela Morel es uno de los símbolos más altos de la dignidad de la mujer dominicana en la lucha de resistencia contra la tiranía trujillista. Se trata de una mujer distinguida que se integró a las actividades conspirativas del movimiento 14 de Junio, que consistía en los esfuerzos de lucha por la libertad; respondía al momento histórico y a la necesidad de liberarse del oprobio y de la opresión a que estaba sometido el país.
Asela Morel mantuvo siempre en alto sus principios junto a esa pléyade de mujeres encarnada en las Mirabal, una afirmación del sentimiento democrático de la República Dominicana. La propia vida profesional de la doctora Morel, así como su discreto ejercicio del que nunca reclamó ninguna compensación confirma la estirpe ética de esta ciudadana que todavía en la etapa final de su vida irradia luz y decoro.
“Yo creía que ese día me iban a matar”
¿Cómo fue que usted se involucró en el movimiento?
Bueno, yo me involucré porque Rafael Francisco Bonnely me lo propuso, pero ellos cometieron un error grandísimo conmigo porque yo había ido sólo a dos sesiones del movimiento; yo era amiga de las Mirabal, ellas eran clientas mías y entonces, pues nada...
¿Ellas eran sus pacientes?
Sí, aquí en la capital.
¿Por qué dice que se equivocaron con usted?
Lo primero que hicieron fue ponerme tres foro en El Caribe y lo menos que decía era que yo era una pervertida. Ellos acostumbraban a desacreditar públicamente a la gente que querían llevar presa.
¿Qué era lo que se estaba planteando en el 1J4?
Bueno, ya Rafael Francisco estaba preso. Cuando me llevaron esa noche él tenía la espalda negra de los golpes de La 40Ö. (hondo pesar en la expresión de su rostro cuando recuerda ese episodio y ya no puede dar más detalles).
¿Qué figura importante la interrogó?
Todos los que estaban ahí, el esposo de Angelita, León Estévez. Eran varios.
¿Cómo fue esa noche que la interrogaron?
El primer día cuando me llevaron me interrogaron, me trancaron en una habitación y las hermanas Mirabal llegaron al otro día. A una muchacha de Puerto Plata (Dulce Tejeda) la trancaron con las mujeres malas y tenía mucho frío y ni siquiera podía dormir.
¿A usted la trancaron con Minerva
Me trancaron con Minerva y sus hermanas y una muchacha de Puerto Plata.
¿Usted fue la primera mujer que la llevan por el movimiento
No, ya en Santiago tenían presas.
¿Cómo fue esa experiencia de la tortura?
En La 40 nosotros estábamos acostados en el suelo. Nos acostaron a las cinco; las paredes estaban llenas de defecación que se habían hecho y se habían limpiado con la pared; nos sacaban una vez al día para ir al baño. Yo tuve 15 sin bañarme hasta que me soltaron y me dijeron: “de su actitud depende su vida”
¿Veía torturar a otros?
Sí, pero torturados de mala manera. Yo oía unos ruidos, pensaba que estaban haciendo una caja para entrarnos ahí, porque estaban en una casita al lado de nosotros.
¿Y cuándo usted los veía, qué decían ellos?
Bueno, nada, ellos estaban casi muertos...
¿A las Mirabal las interrogaban delante de Ud?
No, a ellas las sacaban a la media noche y yo temblaba cada vez y decía, ¡ay Dios mío, qué le van a hacer!
¿Qué significó estar en la cárcel en una dictadura?
Yo creía que me iban a matar, pero entonces era guapa y aguanté.
¿Cuándo se la llevaron presa le dijeron por qué?
No, camine, solamente. Ya me habían puesto tres foros y como estaba Rafael Francisco peso, y Pipe Faxas, que era mi enllave, pues yo sabía lo que iba a pasar.
¿Qué le preguntaban en el interrogatorio?.
Me preguntaban que qué hice, que qué dijeron, qué pensaban hacer mis amigos, que por que yo me metí ahí.
¿Por qué usted se metió en el movimiento?
¡Bueno, pero la vida que se llevaba.! Yo era médico, estaba al tanto de todo lo que estaba pasando.
¿También estaba enterada de la conspiración del grupo?
Sí. Yo estaba haciendo un parto y esa noche me quedé a dormir allá.
¿Y el grupo, la puso a hacer algo?
No, no me dio tiempo
¿Qué pasó después de la muerte de Trujillo?
Nada, me dejaron tranquila. Yo seguía trabajando; algunas clientas se alejaron, otras siguieron viniendo. Ya la cosa estaba como más floja.
No hay comentarios:
Publicar un comentario